Periodismo Instituto Peninsular "El mundo fantástico de J. K. Rowling"
- Paloma Peña & Emilia López
- 24 may 2016
- 6 Min. de lectura
Las Alumnas Paloma y Emilia de 2º de Sec. del Instituto Peninsular prepararon el presente trabajo de Investigación Biográfica para elaborar este reportaje acerca de J. K. Rowling afamada escritora británica, aclamada principalmente por su saga "Harry Potter".

La escritora británica Joanne Kathleen Rowling (J.K. Rowling) se ha hecho célebre por su serie de novelas dedicadas a las aventuras de Harry Potter, que se ha convertido en uno de los mayores fenómenos literarios de la historia. J. K. Rowling ha logrado que muchos niños y adolescentes prefieran leer un libro a pasar varias horas viendo la tele.
Joanne Kathleen Rowling es una tímida británica que se propuso escribir siete entregas de la serie, que equivalen a los cursos que el protagonista debe superar en la escuela de magia y hechicería a la que asiste cuando se escapa de la horrible realidad cotidiana en casa de sus mezquinos tíos.
Según algunos críticos literarios, la autora logró crear en sus novelas una inquietante atmósfera atractiva a los ojos de lectores de muy diversa condición y edad. Prácticamente desconocida y con problemas económicos en la primera mitad de la década de los noventa, cuando vivía de una modesta pensión como desempleada, ahora se ha convertido en una mujer rica y popular en Europa y sobre todo en Estados Unidos, donde multitudes de niños acompañados por sus padres soportan largas colas en las librerías para hacerse con las últimas aventuras del pequeño mago.
Joanne Kathleen Rowling nació el 31 de julio de 1965 en la pequeña localidad británica de Chipping Sodbury. Debido al trabajo de su padre, su familia tuvo que cambiar de residencia en varias ocasiones durante su infancia.
Tras una breve estancia en Yate, se mudaron a Winterbourne, siempre sin alejarse de los suburbios de Bristol, entorno en el que se forjaron los primeros recuerdos de la imaginativa niña, que pasaba horas compartiendo sueños y fantasías con su hermana. Lectora y escritora precoz, entusiasta aficionada a devorar novelas para adultos, a los seis años ideó un conejo que tuvo el honor de ser su primer héroe en un cuento que tituló Rabbit.
En Winterbourne las niñas hicieron amigos entre el vecindario; uno de ellos se llamaba Ian Potter. Aficionada a adoptar nombres extraños para los protagonistas y lugares de sus novelas, muchos años después Joanne tomó prestado ese apellido para dar vida a su famoso personaje. Cuando Joanne tenía nueve años, los Rowling hicieron realidad su sueño y se mudaron a Gwent llamada Forest of Dean, donde descubrió el placer de jugar en los verdes campos británicos próximos al río Wye.
Pero el feliz cambio tuvo su contrapartida en los problemas en la nueva escuela a la que asistio y que acabó por convertirse en un tormento, ya que recordaría por siempre a su odiada profesora Mrs. Morgan, hasta el punto de trasladarla a sus novelas y hacer que encarnara a uno de sus malévolos personajes.
Joanne, creció y dejó la escuela primaria de Tutshill para entrar en la de Wyedean, donde empezó a interesarse por los idiomas. Alumna aplicada, pronto destacó también por su afición a contar historias a un reducido círculo de amigos, quienes escuchaban con atención la narración de largos relatos en los tiempos del recreo. Durante su adolescencia escribió mucho, pero, con la excepción de algunos divertidos cuentos, nunca se atrevió a mostrar sus manuscritos a nadie.
Una vez graduada en Wyedean, Joanne K. Rowling se matriculó en la Universidad de Exeter, donde, siguiendo el consejo paterno, estudió francés con el propósito de encontrar después un buen trabajo como secretaria bilingüe. Con los títulos de lengua y literatura francesas todavía relucientes, se trasladó a la sede de Amnistía Internacional en Londres para realizar un trabajo de investigación sobre las violaciones a los derechos humanos en el África francófona.
Tras este breve período de formación empezó a trabajar como secretaria, pero pronto descubrió que el orden y la rutina no iban con ella. Varias experiencias frustrantes en diferentes empresas, unidas a la triste desaparición de su madre, enferma de esclerosis múltiple, la llevaron a dejarlo todo a los veintiséis años y a abandonar el país con la intención de enseñar inglés en el extranjero.
En Lisboa disfrutó enseñando su lengua materna a alumnos portugueses y tuvo bastante tiempo para escribir, su verdadera vocación. Allí conoció y se enamoró de Jorge Arantes, un periodista de la televisión portuguesa con el que contrajo matrimonio en octubre de 1992 y con quien, un año más tarde, tuvo una hija a la que llamó Jessica. Sin embargo, el matrimonio no prosperó y pronto acabó en divorcio.
Madre de una niña pequeña y sola en un país extranjero, en 1996 Joanne decidió regresar a Gran Bretaña y se instaló en la ciudad escocesa de Edimburgo, cerca de su hermana Dianne, donde llegó con la firme intención de acabar y publicar una novela sobre un tal Harry Potter, personaje infantil con poderes mágicos, cuyas andanzas había imaginado bastante tiempo atrás durante un interminable viaje en tren entre Manchester y Londres.
La tenaz profesora de francés pasó muchas tardes de su vida escribiendo en un cálido café próximo a un pequeño apartamento sin calefacción en el que malvivía con su hija. Finalmente, la novelista logró una beca del Scottish Arts Council que le permitió concluir, cinco años después de empezada, la que entonces era la obra de su vida: Harry Potter y la piedra filosofal.
Recorrió sin éxito con la copia mecanografiada por ella misma, hasta que en 1997 consiguió por fin que la prestigiosa firma británica Bloomsbury publicara el libro. Pocos meses después, Scholastic Press compró los derechos de la novela para Estados Unidos, por una suma superior a los 14,5 millones de pesetas, una cifra muy importante para un libro infantil. Rowling empezó a ser popular en su propio país, y durante los primeros meses se vio ampliamente superada por la situación, sin poder escribir ni una sola línea.
A punto de acabar el segundo libro de la serie, entró en una fase crítica y llegó a pensar que estaba escribiendo “basura”, según confesaría tiempo después en una entrevista. Nada acostumbrada a manejar semejantes sumas de dinero ni a la presión de los medios de comunicación, Joanne se bloqueó y tardó en adaptarse a la nueva situación, hasta el punto de verse obligada a modificar su sencillo estilo de vida. Después decidió dejar las clases definitivamente para dedicarse por entero a lo que siempre había anhelado: escribir.
La publicación de su primer libro supuso un giro mágico en su vida. La realidad del extraordinario éxito superó ampliamente todas las expectativas de las editoriales británica y estadounidense que lo habían publicado. Las posteriores ediciones de los siguientes libros de la serie reafirmaron el éxito inicial y dieron lugar a un fenómeno literario, al que la prensa denominó “pottermanía”.
Condecorada con el título de Oficial del Imperio Británico y convertida en la persona que ocupa el tercer lugar por volumen de ganancias en su país, según un listado de la prestigiosa revista Forbes, Joanne trató de mantener contra viento y marea su discreto estilo de vida. Todas las mañanas siguió llevando a su hija al colegio siempre que las giras promocionales de sus novelas se lo permitían, y procuró escribir los restantes libros de Harry Potter. Al tener tanto éxito sus libros, productores de cine han convertido estos asombrosos libros en una maravillosa obra de cinematografía. Sus libros actualmente se encuentran en más de 35 idiomas. Al publicar su séptimo y último libro, “Harry Potter y las reliquias de la Muerte” ha sido el libro con más demanda en el pre-ordenado, de las tiendas de Barnes & Noble and Borders y en amazon.com.
Se casó con Neil Murray y tuvo dos hijos, David y Mackenzie. Ha publicado otras obras como “Una Vacante Imprevista”, “El Canto del Cuco” “The Silkworm”, entre otras y algunas de ellas referentes o mencionadas en su máxima obra “Harry Potter”, su última publicación fue el año pasado publicando “Career of Evil”
J.K. Rowling, nos ha enseñado y deseado, leer un libro mil veces más que estar sentado viendo una película, que un libro es más que un montón de páginas con letras, que un libro tiene su propia voz y puede transportarte a un millón de lugares distintos, aparte de ampliar tu creatividad, imaginación y ayudarte en un centenar de cosas más, esta autora empezó desde cero y veamos donde está sentada ahora, esto nos demuestra que si haces lo que te gusta, serás el mejor en eso sin importar tu estatus ni origen.




























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