Donald Trump, una crítica.
- Andrea Nielsen
- 27 may 2016
- 2 Min. de lectura

Donald Trump es un nombre muy resonado en los últimos dos años, puesto que, no solo es uno de los hombres de negocios con más influencia del mundo sino que, es el nuevo candidato republicano que esta en la carrera hacia la presidencia de Estados Unidos. Este hombre ha creado una controversia impresionante en los últimos 10 meses, ha hecho comentarios racistas, sexistas, generalizantes y degradantes. Donald Trump ha demostrado en múltiples ocasiones sus maneras de hacer negocios, las cuales, han demostrado ser efectivas por lo menos para el, sin embargo, dado a que no tiene antecedentes en la política, ¿Qué nos asegura que puede desarrollarse tan bien como lo hace en los negocios en la política?
Trump tiene pensamientos y puntos de vista dignos de épocas pasadas, en las cuales el racismo predominaba las calles y ciudades de Estados Unidos. El habla de “hacer a Estados Unidos bueno otra vez” pero, de lo que no se ha percatado, o por lo menos espero que ese sea el caso, es que Estados Unidos ha pasado por un sinfín de procesos y sucesos que lo ha llevado a ser lo que es ahora, lo cuál es, a mi opinión y de otras miles de personas, lo mejor que ha estado esta potencia mundial. Claro esta que se necesitan cambios para su óptimo desarrollo, pero esto no implica volver a la manera en la que se manejaban las cosas antes. No hay necesidad de volver a tener un gobierno racista y poco tolerante.
Este magnate de los negocios ha demostrado en varias ocasiones su capacidad infalible de atacar y degradar a las personas, en especial a mujeres, afroamericanos, musulmanes y latinos. Esta característica lo convierte no solo en una persona ignorante sino en un bully. A lo largo de la historia del mundo ha tenido varios representantes de potencias mundiales que tenían este tipo de pensamientos y comportamientos dignos de un bully, Hitler fue uno de ellos… todos sabemos en que resultó eso.
Donald Trump ha sido partícipe de múltiples debates, en los cuales demuestra no hacer uso de la etiqueta y modales dignos del próximo presidente de los Estados Unidos. El susodicho utiliza recursos como callar a sus contrincantes y mediadores y no respetar sus puntos de vista y propuestas.
La madurez política casi nula que le Sr. Trump a mostrado a lo largo de su campaña es alarmante, dado que, es terrorífico pensar que el nuevo líder de una de las potencias mundiales más importantes de sea una persona que no respeta, que hace menos a cualquier persona que sea demasiado “diferente”, que se sienta superior a sus iguales y que ha demostrado no tener la ética profesional y política necesaria para dirigir un país, mucho menos una potencia mundial.


























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